Sigue nuestra incursión en el Alcazar. No obstante como solemos quedar temprano en algún sitio próximo, tomamos notas acuareladas de lo que vemos, o nos dejan ver. En este caso palomas que desaparecen de inmediato, casi sin poder definirlas. La fuente ni se movió.
Mas tarde, ya dentro del recinto palatino tomo otro derrotero y trato de pintar la luz del lugar y pintar de forma menos pastelada. No sé si lo consigo.
Such nice and gentle colors. Lovely.
ResponderEliminarMuy buenas las dos.
ResponderEliminarte felicito
Estoy siguiendo todas las entradas. .Imagino que estarás disfrutando mucho en esas horas mañaneras del Álcazar. Me gustan todas las acuarelas por su frescura, pero me parece especialmente bonita ésta última del pasillo de árboles con la puerta al fondo. Me encanta.
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